Se necesita un año para producir un solo reloj y cada uno debe pasar rigurosos controles de calidad antes de su lanzamiento.
Una buena manera de detectar un Rolex falso es comprobando el rehaut o anillo interior del bisel. Debería tener grabados.
Materiales de alta calidad
Al comprar un Rolex falso, es importante considerar la calidad de los materiales utilizados. Se elaborará una réplica de alta calidad con una mezcla de metales y plásticos superiores. y los detalles deben ser replicados cuidadosamente. Por ejemplo, un Rolex genuino tendrá la palabra “ROLEX” grabada alrededor del bisel (aunque los modelos más antiguos pueden tener estos detalles grabados con láser). También cuenta con una ventana cíclope que proporciona magnificación 2.5x; las falsificaciones normalmente carecen de este efecto de aumento.
Además, los relojes Rolex auténticos incorporan material luminiscente para iluminar la esfera en condiciones de poca luz. Los biseles falsos de Rolex están fabricados con material Cerachrom altamente resistente a los arañazos y son lo suficientemente duraderos para su uso en el entornos más desafiantes.
Rolex también utiliza una innovación patentada conocida como espiral Parachrom, que es resistente a golpes y fluctuaciones de temperatura, lo que garantiza precisión y durabilidad.
Artesanía
Los Rolex auténticos son fabricados por expertos artesanos que ensamblan, ajustan y terminan meticulosamente cada reloj para garantizar su calidad. Estos relojes también deben pasar una serie de pruebas para garantizar que cumplir con los altos estándares de Rolex. Como resultado, los Rolex genuinos son más caros que sus homólogos falsos. Además, están elaborados con materiales superiores y pueden durar décadas. Por eso siempre debes buscar un vendedor de confianza y validar la autenticidad de tu reloj antes de realizar la compra.
Cuando se trata de detectar Rolex falsos, las señales de advertencia más comunes son la baja calidad de la artesanía y los detalles del reloj menos refinados. Por ejemplo, los relojes falsos suelen tener impresiones y acabados de mala calidad en sus esferas y manecillas. Además, pueden tener cierres de pulsera poco atractivos o un diseño de bisel descuidado.
Otra señal de advertencia es si un reloj no tiene grabados en el fondo de la caja. Esto se debe a que los Rolex genuinos no muestran logotipos, textos ni grabados en sus cajas. Además, la ventana de fecha en un reloj rolex genuino Por lo general, se establece en un aumento de 2.5X, lo que facilita la lectura. Si la ventana de fecha está descentrada, es probable que sea falsa. Por último, los Rolex genuinos tienen un peso considerable y se sienten sólidos en la mano. Por el contrario, las falsificaciones tienen una construcción más ligera y parecen endebles. Esto se debe a que están fabricados con materiales inferiores.
Autenticidad
Los relojes Rolex se encuentran entre las marcas más reconocibles y valiosas del planeta, razón por la cual las falsificaciones son tan populares. Proporcionan una manera asequible de hacer una declaración de moda sin gastar dinero en un reloj genuino. Sin embargo, es importante saber cómo detectar un Rolex falso antes de gastar el dinero que tanto le costó ganar en uno. Esto le ayudará a evitar estafas y a tomar la mejor decisión para sus necesidades. También es fundamental comprar un reloj de un distribuidor de confianza que ofrezca servicios posventa y garantice la satisfacción del cliente. Esto se hace fácilmente consultando los términos, condiciones y reembolsos. sección en el sitio web.
Autenticidad significa ser genuino y fiel al original. La autenticidad es una parte importante del mercado del lujo porque refleja la calidad y la artesanía del producto. Por ejemplo, un Rolex real tiene detalles de reloj más refinados que una réplica. También tiene una ventana cíclope más grande, que facilita la lectura de la fecha.
La autenticidad también es importante porque ayuda a preservar la reputación de la marca. Los falsificadores no están sujetos a los mismos estándares estrictos que los fabricantes genuinos, por lo que pueden producir falsificaciones que parecen reales. Como resultado, cada vez es más difícil distinguir entre productos genuinos y falsos.